Incoterms 2020: claves para operar en comercio internacional

Los Incoterms (Términos Internacionales de Comercio), constituyen un conjunto de normas creadas por la Cámara de Comercio Internacional (CCI). Su finalidad es definir de manera clara las obligaciones de compradores y vendedores en operaciones internacionales. Estas reglas, que han ido actualizándose con el tiempo, resultan esenciales para distribuir correctamente costes, responsabilidades y riesgos en la compraventa de mercancías a nivel global. La versión más reciente, Incoterms 2020, ofrece una guía precisa y actualizada para facilitar la elección del término más adecuado según las particularidades de cada operación. 

Antes de seleccionar un Incoterm, conviene analizar en detalle las características de cada uno. Son once en total, cada uno con implicaciones diferentes para ambas partes del contrato, especialmente en cuanto a transporte, seguros y aduanas. Una decisión bien informada puede evitar malentendidos y conflictos durante el proceso logístico. 

1. EXW (En fábrica) 

Con este término, el vendedor pone la mercancía a disposición del comprador en sus instalaciones o en un lugar convenido. Toda la gestión del transporte corre a cargo del comprador desde ese punto. Es una opción que descarga al vendedor de cualquier responsabilidad logística una vez la mercancía está lista. 

2. FCA (Franco transportista) 

En este caso, el vendedor entrega la mercancía al transportista designado por el comprador, en el punto acordado. A partir de ahí, es el comprador quien asume costes y riesgos. Esta fórmula permite flexibilidad en el transporte y facilita la coordinación logística. 

3. CPT (Transporte pagado hasta) 

El vendedor se encarga del transporte hasta el destino pactado, aunque los riesgos se transfieren al comprador al entregar la mercancía al transportista. Es útil para quienes desean mantener el control sobre la logística, pero no sobre los riesgos. 

4. CIP (Transporte y seguro pagados hasta) 

Similar al anterior, pero con la diferencia de que el vendedor también cubre un seguro mínimo. Resulta especialmente conveniente si el vendedor quiere garantizar cierta protección durante el envío. 

5. DAP (Entregado en lugar) 

El vendedor se responsabiliza de llevar la mercancía hasta un destino concreto, sin incluir la descarga. Los riesgos se transfieren una vez llega al lugar acordado. Es ideal para compradores que no desean encargarse del transporte. 

6. DPU (Entregado en lugar y descargado) 

Aquí, el vendedor también asume la descarga en el destino final. Ofrece una solución completa al comprador, que no tiene que preocuparse por la manipulación final de la carga. 

7. DDP (Entregado con derechos pagados) 

El vendedor se encarga de absolutamente todo: transporte, trámites aduaneros, impuestos y entrega final. Es una fórmula cómoda para el comprador, aunque implica mayor compromiso y gestión por parte del vendedor. 

8. FAS (Franco al costado del buque) 

Este término se aplica en el transporte marítimo. El vendedor entrega la mercancía junto al buque en el puerto convenido. Desde ese momento, el comprador asume todos los riesgos y costes. 

9. FOB (Franco a bordo) 

También marítimo, este término implica que el vendedor coloca la mercancía a bordo del buque. A partir de ahí, las responsabilidades pasan al comprador. Es una fórmula habitual en comercio internacional por vía marítima. 

10. CFR (Coste y flete) 

El vendedor asume los costes del transporte hasta el puerto de destino. Sin embargo, los riesgos se transfieren una vez la mercancía ha sido cargada a bordo. 

11. CIF (Coste, seguro y flete) 

Este último término añade el seguro al coste del transporte. El vendedor cubre todo hasta el puerto de destino, incluyendo una cobertura mínima. Es aconsejable cuando se quiere ofrecer una entrega más segura y controlada. 

La elección del Incoterm correcto no debe tomarse a la ligera. Cada operación comercial tiene necesidades específicas que deben ser evaluadas con detenimiento. Conocer a fondo las implicaciones legales y logísticas de cada término permite reducir errores y conflictos. Para tu operativa de comercio internacional, confía en Caja Rural de Navarra. Somos conscientes de la dificultad que conlleva hacer negocios en los mercados internacionales, por ello, es necesario disponer de compañeros de viaje en los que puedas apoyarte en todo momento. 

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